Bienal Tlatelolca es una iniciativa cultural diseñada por Balam Bartolomé (Ocosingo, 1975) y Antonio Monroy (Toluca, 1984), que opera en el espacio de Central de Maquetas (en operación desde 1956) en la torre 5 de Febrero, en la 2ª sección del Conjunto Habitacional Nonoalco Tlatelolco, un prototipo de isla urbana diseñada por el arquitecto Mario Pani. Central de Maquetas cedió un área de su establecimiento para el funcionamiento de la Bienal, inciativa que desde 2019 ha servido como espacio de reflexión y producción para arquitectos, cineastas, diseñadores y artistas, nacionales y latinoamericanos, quienes han sido invitados a ocupar el espacio en diferentes períodos. Como consecuencia de estas residencias, donde el punto a desarrollar ha sido la construcción y conexión de los artistas con la comunidad y el territorio que habitan, han surgido colaboraciones con antropólogos, cocineros, biólogos, arqueólogos y vecinos. Durante los últimos dos años, la Bienal Tlatelolca ha estado ineludiblemente involucrada e interesada por los hechos sociales, políticos e históricos que han tenido lugar en la zona, desde el período mesoamericano hasta la actualidad, lo que nos ha permitido medir la importancia de Tlatelolco como centro de intercambio (social, económico y cultural), que se construyó y se levanta sobre ruinas, en términos formales y figurados. Tlatelolco relata la destrucción y reconstrucción de México y plantea la arquitectura y construcción de una identidad latinoamericana.
Bajo estos antecedentes y reconociendo a Tlatelolco como un potente generador y portador de la estructura cultural de México, Antonio Monroy y Balam Bartolomé decidieron plantear un formato de producción y pensamiento artístico que conecta el espacio físico, cultural y simbólico alrededor de la unidad habitacional, símbolo de la distopía nacional alrededor de la modernidad.
La premisa de la Bienal Tlatelolca hace constante mención alrededor de la importancia de concientizar el momento histórico actual, y en consecuencia reflexionar cómo se construye, transforma y relaciona con su pasado. Vivimos un momento de transformación política, económica, social y cultural sin precedentes. Es fundamental actuar, activar y generar memoria histórica para los tiempos venideros.