Rafael Blando es un fotógrafo que en la actualidad explora el lenguaje visual mediante la apropiación y re-contextualización de diversos objetos recolectados en viajes y en mercados de pulgas, así como en la intervención y re-valoración de su propio archivo fotográfico. Su obra pertenece a diversas colecciones privadas como lo son el ITESM Campus Laguna y el Museo Regional de la Laguna. Nació en la Ciudad de México en 1982. En el 2019 cursó el Diplomado para la Profesionalización en Prácticas Contemporáneas (DIPPRACC) en el Centro de las Artes Visuales por la Universidad Autónoma de Coahuila. En el 2018 fue invitado a participar en Foto Coahuila y en el Festival Internacional de las Artes Julio Torri con su exposición individual titulada “Horizontes". Ha expuesto en diversos museos como el Museo Regional de la Laguna, en Torreón, México; el Museo de la Moneda del Banco de México, en Torreón, México y el Ex - Convento del Carmen, en Guadalajara, México. En el 2017 lo nominaron a las Lunas del Auditorio por su participación en el documental "Mi Tierra". Del 2015 al 2017 publicó crónicas de viaje ilustradas con fotografías en la revista Siglo Nuevo del periódico El Siglo de Torreón.
Actualmente estoy interesado en la construcción de la imagen y la latencia de su significado. Considero a la fotografía, no como un duplicado de la realidad, sino que como una especie de generador de realidades paralelas. De aquí se desprende mi interés en la exploración del binomio realidad-ficción y en todas aquellas relaciones que se generan en su interacción. Los elementos lúdicos en mi obra sirven para representar de una manera sencilla y algo irónica, aquellas situaciones sociales que me intrigan o perturban. Es como una válvula de escape. Estoy interesado especialmente en cómo las corporaciones, a través de la publicidad, perpetúan el sistema occidental colonialista y cómo incide éste en nuestras vidas cotidianas (como elemento latente e inconsciente). Mi trabajo intenta detonar un pensamiento crítico sobre cómo las instituciones de poder nos han manipulado para formar una imagen-producto que se promueve como un bien más de consumo. ¿Cómo encajo yo dentro del binomio realidad/ficción?